Con el interés superior de los menores en el punto de mira

Ejercer de tutor de un menor implica el derecho a adoptar decisiones que conciernen a este y acceder a información sobre el niño.

La custodia no es un derecho inherente de los progenitores, sino que conlleva la obligación de velar en cada situación por los intereses del menor. La custodia compartida es la mejor opción para el niño, salvo que lo desaconsejen motivos específicos. Si los progenitores comparten la custodia pero no conviven, deben ser capaces de pactar dónde va a residir el menor.

Si no están casados en el nacimiento del pequeño, se asignará a la madre la custodia exclusiva de este. Sin embargo, una vez confirmada la paternidad, los progenitores pueden presentar una solicitud de custodia compartida a la comisión de asuntos sociales.

Si, más adelante, padre y madre pactan que la custodia del niño sea compartida, podrán notificarlo a la Agencia Tributaria de Suecia. En caso de no ser capaces de ponerse de acuerdo, el progenitor que aspira a la custodia compartida podrá recurrir al juzgado.

Si, por el contrario, comparten la custodia y uno de los padres quiere la custodia exclusiva pero el otro se opone, tendrá que dictaminar al respecto un tribunal.

Custodia exclusiva o compartida

Como tutor uno debe tomar decisiones sobre asuntos importantes que afectan a los hijos, entre otros, en lo relativo a su atención médica, educación y vivienda. También decides sobre temas como el empadronamiento o el pasaporte. Un tutor está obligado a proteger a su hijo de la violencia, las lesiones y los abusos.

En caso de compartir la custodia, los padres han de ser capaces de cooperar y tomar decisiones consensuadas. Un progenitor siempre puede oponerse a una decisión, lo cual repercutirá sobre el pequeño. Si uno de los padres se ausenta durante largo tiempo, ello puede impedir la toma de decisiones sobre el hijo. En ese caso, lo mejor para este será que el otro progenitor asuma la custodia exclusiva.

Si existen motivos específicos como, por ejemplo, actos de violencia, abusos o falta de cuidados, podrá reasignarse la custodia exclusiva al otro progenitor. Las disputas enconadas y prolongadas entre los padres suelen incidir negativamente sobre el menor. Por ello suele ser más aconsejable para el niño que se transfiera a uno de ellos la custodia exclusiva.

La custodia de un hijo puede modificarse mediante acuerdo voluntario entre los padres. Si estos se muestran incapaces de ponerse de acuerdo en lo relativo a la custodia, el asunto deberá ser dirimido por un tribunal. La decisión dependerá siempre de la modalidad de custodia más conveniente para el menor.

Contamos con una larga experiencia judicial en casos de custodia de menores y le asistiremos encantados si no es posible alcanzar un acuerdo con el otro progenitor.

Dónde debe vivir el hijo

El niño residirá con usted si detenta la custodia exclusiva. En caso de compartir la custodia con el otro progenitor, los dos han de pactar dónde se alojará el menor.

Este podrá vivir alternadamente con ambos si mantienen una ágil colaboración y residen cerca el uno del otro.

Al pequeño le conviene vivir en un hogar protegido y próximo a la escuela, los familiares y los amigos. No es conveniente que el niño se vea obligado a abandonar un lugar con el que mantiene una fuerte vinculación.

Como padres podrán convenir dónde va a vivir su hijo. Si no son capaces de llegar a un acuerdo, el asunto podrá resolverse en los tribunales.

En el juzgado prevalecerá el interés superior del pequeño. No deberá vivir en la casa de uno de los progenitores si existe el riesgo de que resulte nocivo para el menor. Por lo demás, ha de alojarse con el padre que mejor garantice una buena relación con ambos progenitores. También se tendrá en consideración la vinculación del niño con sus padres, el entorno doméstico del pequeño y qué es más práctico y razonable para este. Además, al llegar a una cierta edad, la propia voluntad del hijo será un factor decisivo al respecto de dónde debe vivir.

Si no pueden ponerse de acuerdo sobre el lugar de residencia del menor, podremos asistirle en la defensa de sus intereses ante los tribunales.